CAPITULO 2 – REENCUENTROS: DE CUANDO PARECE QUE EL TIEMPO NO HA PASADO.

Es un domingo cualquiera que apriori pasaría sin pena ni gloria, con una previsión muy justita y una marea incómoda.

De repente una llamada, una cita para el lunes y unos trabajos inesperados y como estos hechos inesperados crean una oportunidad.

Los fríos números no mienten y ya han transcurrido 6 meses, medio año, desde que hasta esta oportunidad, estos tiempos extraños y deshumanizados que vivimos no nos habían permitido compartir nuevas vivencias.

Así que dos o tres mensajes después ya estaba todo organizado.

La primera parada fue “Moonrise House” donde Eunate y su madre abrieron las puertas de su refugio, ese lugar mágico que les ha devuelto a la vida en la aldea, la vida en la que los vecinos son personas con nombres propios y que da forma a una comunidad lejos de la frialdad y anonimato de las urbes masificadas.


Moonrise House by @tatebythesea in @ilovetheseaside.
Photo by Sam Strauss (@samstraussfoto) 

La vida de aldea desde el refugio Moonrise House. 
Photo by Sam Strauss (@samstraussfoto)

Después de que “Paskasia” nos obsequiase con su última captura, partimos hacia el siguiente destino para incorporar al siguiente “tripulante” y allí, en la lonja del lugar que le vio nacer, nos esperaba Chus.

El tiempo empezaba a apremiar así que nos dirigimos rápidamente al destino que habíamos prefijado por la mañana. Chus no falló; se conoce “su” costa al milímetro y después de una parada intermedia solo había que correr para entrar al agua. 

Chus Martinez (@chusmasurf). Artesano del surf. 
Lugares para el reencuentro junto con una de sus máquinas para el deslizamiento. 
Photo by @sereas_ohiala_clothing

En ese mismo lugar hace ya un tiempo, probé por primera vez la tabla que llevaba hoy debajo del brazo, una tabla que me hizo conectar de nuevo con la sensación de fluir sobre las olas, perfilando la pared con amplios giros, sintiendo en tus manos las olas mientras te deslizas sobre ellas.

Y ahí estábamos los tres, como si esos 6 meses en realidad hubieran sido un solo día, flotando en aguas turquesas disfrutando de la sencillez de ese momento.

Los otrora habituales abrazos de despedida deberán esperar pero en cualquier caso nos sentimos afortunados de que estos #errantesdelasmareas hayan podido volver a encontrarse y sentir que la conexión sigue viva (Eneko, te esperamos para la siguiente).

 After surfing.
@tatebythesea , @chusmasurf & me . 

Photo by @sereas_ohiala_clothing

De cuando parece que el tiempo no ha pasado.